Eduardo Sosa no pudo tener un mejor regreso con su equipo, Fort Lauderdale, filial del Inter de Miami. El mediocampista barinés de 24 años, jugó completo y dio una asistencia, clave en la victoria 1-2 contra Tormenta en la USL League One. Aquella destacada actuación sirvió incluso, para ser parte del XI ideal de la semana, estando cada vez más motivado para seguir sumando éxitos mientras trabaja en ser llamado por el elenco principal. Suma su tercer año en Estados Unidos, dos con Columbus Crew S.C. y uno, siendo parte de esta nueva escuadra.
Conocido por ser parte de aquel Zamora F.C. que marcó una época en la historia reciente del fútbol venezolano, su mayor objetivo es consolidarse lejos de casa, razón por la cual todos los días trabaja entregándose al máximo, como ha hecho desde los 14 años, cuando pasó a formar parte del cuadro llanero y se dio cuenta de sus importantes habilidades para ser futbolista profesional. Con la Agencia Secasports ha logrado grandes cosas, pero lo más importante ha sido aprender que todo tiene su momento. Está en una etapa interesante.
“Lo mejor que me pudo haber pasado luego de tanto tiempo inactivo por la pandemia, fue sentirme futbolista otra vez. Jugar y que mi desempeño haya ayudado a alcanzar la primera victoria de la historia del equipo me contenta e ilusiona para seguir luchando. Fue difícil no haber podido estar en la cancha, pero ahora estamos enfocados en lo que viene, esperando tener una buena temporada y que eso sirva para dar el salto al primer equipo”, dijo el llanero, quien repasó lo que ha sido una carrera caracterizada por sacrificio y disciplina.
“Cuando trabajas duro, las cosas vienen solas. En Zamora me tocó ser parte de un plantel lleno de gente muy talentosa y siempre tuve la oportunidad de ser regular, gracias a la confianza que tuvieron en mí los diferentes entrenadores. Ser dirigido por Chita me hizo crecer demasiado en todo sentido, porque siempre estaba pendiente no solo de mi desenvolvimiento en la cancha, sino de mi alimentación y detalles que hacen diferencia. Mucho les agradezco también a Julio Quintero y Francesco Stifano, por permitirme jugar la Copa Libertadores de América, un evento sin igual”, recordó Sosa.
Casi a punto de cumplir 18 años, Eduardo conoció a Sebastián Cano, su agente. Todo comenzó por una recomendación que le realizaron, en aras de pensar tanto en su desarrollo profesional como en la internacionalización de su fútbol. Siempre tuvo como meta salir del país a mostrarse en otra latitud, reto que cumplió en 2018 cuando puso rumbo a Norteamérica.
“Ser parte de Secasports significa estar en la mejor Agencia de Venezuela, así que no lo dudé. Sebastián (Cano) me ha ayudado muchísimo para estar donde me encuentro, aunque en los primeros años que estuve aquí no haya tenido las oportunidades que hubiese querido en mi antigua organización. Actualmente, estamos planeando el futuro, pero siempre fijos en nuestro presente. Deseo ganarme un puesto para estar en el primer plantel, por lo que en cada entrenamiento y partido me entrego para demostrar que estoy preparado para cuando llegue esa oportunidad”, agregó, estando claro que en algún momento recibirá el llamado que tanto quiere, ganándoselo con demostraciones.
Desde los cuatro años, edad en la que comenzó a patear balones debido a que su padre le inculcó amor por esta disciplina, hasta el presente, ha vivido muchas cosas que le dan forma a su personalidad. Fue parte del grupo de juveniles que contó con Ronald Hernández, YefersonSoteldo y Jhon Murillo, promovido a Primera por Sanvicente. Debutó apenas con 16 calendarios cumplidos, como creyendo que vivía un sueño. Todo, ganado a pulso, sudando al máximo cada gota sobre el escenario donde mejor se desempeña: la cancha.
“A mi favor tengo que todavía soy una persona joven, con futuro, pero tienes que saber que en todo momento debes trabajar al máximo. La sensación de ser feliz solo te la dan los partidos, tener acción y cumplir con lo que te piden. Regresar fue un buen primer paso y ahora debo dar muchos más. Solamente estoy pensando en eso”, concluyó el venezolano, uno de tantos que en alto deja el nombre del país en alto a kilómetros del hogar.
